Acá
un esclavo de casa
moviéndome entre tinieblas creadas por mi mismo
sin futuro, almas errantes y ciegas
liviandad de ser una sombra
una forma forcluida por la sociedad
la buena orientación, las buenas maneras
Acá
moviendo textos que emanan de viejos pozos
secos, ralos y oscuros
y un espasmo sacude
una vez más, tenebroso
a la palabra
del Pueblo
Mientras
el polvo sigue penetrando mis huesos
cano, el futuro aguarda
agazapado
tarareo una vieja melodía
del siglo XIX
Mientras
los jóvenes persisten
recalcitrantes en su
temática
no hay revolución
no hay revolución posible
Ellos
demonios fétidos e inmundos
se alimentan de tu nuez cerebral
aflautados
gritando
cánticos triunfales
jueves, abril 07, 2011
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